Adquisición indirecta: tendencia hacia las transacciones digitales

Adquisición indirecta: tendencia hacia las transacciones digitales
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En los departamentos de compras, y en particular en la adquisición indirecta, la tendencia es hacia la digitalización de las transacciones. Así lo revela la encuesta realizada por Manutan Group a sus 545 clientes franceses de grandes cuentas durante el pasado año. Soluciones web, e-procurement, Punch-Out… conozca más sobre este revelador panorama.

Transacciones digitales frente a transacciones tradicionales

Las transacciones digitales, que incluyen soluciones web y de e-procurement, están ganando terreno de forma lenta pero segura frente a las transacciones tradicionales (teléfono, fax, etc.).

Los pedidos realizados a través de e-procurement han aumentado en 3 puntos en el último año, y los realizados a través de un sitio de comercio electrónico han subido 1 punto.

En 2018, los pedidos tradicionales todavía representaban el 51 % del total, pero es muy probable que en 2019 la relación se invierta y los pedidos digitales sean la mayoría.

Enfoque en las soluciones de e-procurement

Como puede ver, las operaciones realizadas mediante soluciones de e-procurement van en aumento. Sin embargo, parece que solo el 25 % de las organizaciones encuestadas están equipadas con este tipo de soluciones. Esto significa que todavía hay mucho margen de mejora en las grandes empresas.

Hasta la fecha, el Punch-Out parece ser la solución preferida. Este tipo de catálogo electrónico es especialmente relevante cuando se trata de compras indirectas, caracterizadas por una amplia gama de artículos de baja frecuencia. Las soluciones Punch-Out ofrecen muchos beneficios en términos de experiencia del usuario: información actualizada en tiempo real (estado del stock, tiempos de entrega, etc.), bajos costes de mantenimiento, motor de búsqueda eficiente, y la posibilidad de mantener las compras bajo control.

Digital: un impulsor del rendimiento en materia de calidad

El cambio a las transacciones digitales reduce las tareas de bajo valor añadido, acorta los plazos de entrega y proporciona un control más estricto del gasto, pero, sobre todo, ¡mejora el índice de satisfacción del cliente!

Al limitar las operaciones manuales, el riesgo de error se reduce considerablemente, como se desprende claramente de los datos de la encuesta:

  • las empresas con un bajo índice de digitalización (inferior al 20%) registran un índice medio de satisfacción del cliente del 84 %;
  • las empresas con un alto índice de digitalización (superior al 80 %) registran un índice medio de satisfacción del cliente del 93 %.

Algunas cifras a tener en cuenta

Dado que la digitalización es ante todo sinónimo de ahorro, es importante recordar este hecho: cuanto mayor sea la tasa de digitalización de los pedidos, menores serán los costes indirectos.

El coste medio de una transacción puede dividirse entre un máximo de 5: desde 96 euros para una transacción no digital (consultar el producto en un catálogo, realizar un pedido por teléfono, etc.) hasta 19 euros para una transacción totalmente digitalizada (desde la búsqueda de productos hasta la facturación).

Entonces, ¿a qué espera para digitalizar sus transacciones?

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