5 puntos a tener en cuenta al elegir una silla ergonómica

Pasamos gran parte del día sentados, ya sea en el trabajo, en casa o durante las actividades de ocio. Por ello, elegir la silla adecuada es fundamental para garantizar nuestra comodidad, salud y productividad. Las sillas ergonómicas están diseñadas para proporcionar un apoyo adecuado a la columna vertebral, favoreciendo una postura correcta y previniendo diversos problemas de salud.

En el lugar de trabajo, donde pasamos largas horas sentados frente al ordenador, ya sea en casa o en la oficina, no se puede subestimar la importancia de una silla ergonómica. La silla adecuada no sólo proporciona comodidad, sino que también reduce la fatiga y ayuda a prevenir lesiones relacionadas con una mala postura.

Problemas causados por sillas inadecuadas

Las sillas convencionales no suelen proporcionar el apoyo necesario para la columna vertebral, lo que puede provocar diversos problemas de salud, como:

• Dolores de espalda, cuello y hombros: Una mala postura puede sobrecargar los músculos y las articulaciones, provocando dolor y molestias.
• Fatiga y falta de concentración: Una mala postura puede dificultar la respiración y la circulación sanguínea, provocando fatiga y falta de concentración.
• Lesiones graves: Una mala postura puede provocar el desgaste de las articulaciones e incluso lesiones graves como hernias discales.
• Estrés y ansiedad: El dolor físico causado por una mala postura puede desencadenar estrés y ansiedad. La incapacidad de encontrar comodidad y alivio puede aumentar los niveles de estrés en el lugar de trabajo, afectando al bienestar mental y emocional de los empleados.
• Disminución de la concentración y la productividad: Cuando una persona se siente incómoda debido a una mala postura, es más difícil mantener la concentración y centrarse en las tareas. El dolor físico y el malestar pueden ser distracciones constantes, lo que conduce a una disminución de la productividad y de la calidad del trabajo realizado.
• Baja autoestima e insatisfacción laboral: El dolor crónico y el malestar físico pueden afectar a la autoestima y a la satisfacción laboral. Sentirse constantemente incómodo o incapacitado debido a la postura puede llevar a los trabajadores a desarrollar una visión negativa de su entorno laboral e incluso afectar a su autoestima.
• Aislamiento social: Las personas que sufren dolor crónico debido a una mala postura pueden sentirse aisladas socialmente. Las molestias físicas pueden dificultar la participación en actividades sociales en el lugar de trabajo, lo que conduce a una sensación de aislamiento y distanciamiento de los compañeros.
• Depresión e irritabilidad: El dolor crónico y el malestar físico pueden contribuir al desarrollo de síntomas depresivos e irritabilidad. La sensación de impotencia al afrontar el dolor y la frustración de no poder encontrar alivio pueden conducir a un estado emocional negativo. 

¿Cómo elegir la silla ergonómica adecuada?

Para elegir la silla ergonómica ideal, es fundamental tener en cuenta varios aspectos que afectan directamente a la comodidad y la salud del usuario. He aquí cinco puntos clave a tener en cuenta a la hora de elegir la silla ergonómica perfecta:

• Ajuste del asiento: La altura del asiento es uno de los factores más importantes a tener en cuenta. El asiento debe ajustarse de modo que los pies queden apoyados en el suelo y las rodillas formen un ángulo de 90º. Esto ayuda a distribuir el peso uniformemente y reduce la presión sobre las piernas y la zona lumbar.
• Ajuste del respaldo: El respaldo de la silla ergonómica debe proporcionar un apoyo adecuado a la columna vertebral, desde los hombros hasta la base de la espalda. Un respaldo ajustable permite al usuario encontrar la posición más cómoda y favorece una postura correcta durante toda la jornada laboral.
• Ajuste de los reposabrazos: Los reposabrazos deben ser ajustables para que los codos queden apoyados en un ángulo de 90º. Esto ayuda a reducir la tensión en hombros y brazos, previniendo lesiones por esfuerzo repetitivo (RSI) y mejorando el confort durante largos periodos de trabajo.
• Apoyo lumbar: El apoyo lumbar es esencial para mantener una postura correcta y evitar dolores de espalda. La silla ergonómica debe ofrecer un apoyo adecuado a la curvatura natural de la columna lumbar, ayudando a aliviar la presión sobre esta zona y reduciendo el riesgo de lesiones.
• Materiales de calidad: Los materiales utilizados en la fabricación de la silla ergonómica deben ser de alta calidad y duraderos. Tejidos transpirables, espumas de alta densidad y estructuras robustas garantizan no sólo la comodidad, sino también la durabilidad a largo plazo, proporcionando un excelente retorno de la inversión.

A la hora de elegir una silla ergonómica, es importante probar diferentes modelos y ajustes para encontrar la opción que mejor se adapte a las necesidades individuales de cada usuario. Invertir en una silla de calidad significa invertir en salud y bienestar en el lugar de trabajo.

En resumen, si tienes en cuenta estos cinco aspectos -ajuste del asiento, ajuste del respaldo, ajuste del reposabrazos, apoyo lumbar y materiales de calidad- a la hora de elegir una silla ergonómica, garantizarás comodidad, salud y productividad en el lugar de trabajo. Elige bien y disfruta de las ventajas de una postura correcta y un entorno de trabajo ergonómicamente saludable.